miércoles, 29 de marzo de 2017


Resultado de imagen de trasplante de planta 


¿CÓMO TRASPLANTAR UNA PLANTA?



Estos son unos sencillos pasos para trasplantar  tu plantas de una forma mas segura.








 1.  Añadimos el sustrato  para cubrir el fondo de la maceta y dejamos el resto vacía para posteriormente colocar la planta. Para saber la cantidad del sustrato que tenemos que añadir, introduciremos la planta dentro de la maceta (sin sacarla de su maceta original, para no estropear el cepellón mientras realizamos las medidas) e iremos añadiendo el sustrato debajo de la planta hasta ver que la planta este  3-4 cm debajo de la altura del borde de la maceta (en su interior).

2.       Sacamos la planta de su maceta original, con mucho cuidado y sin estropear las raíces. Hay que tener en cuenta que es muy importante que el cepellón salga entero de la maceta, que no se estropee, ni se deshaga.

3.       Colocamos la planta en la maceta donde la vamos a trasplantar y rellenamos los huecos que quedan dentro de la maceta con el sustrato que hemos utilizado anteriormente.  Hemos de tener en cuenta que el cepellón trasplantado tiene que quedar enterrado solamente un centímetro por debajo de la tierra, de lo contrario, hay muchas posibilidades de dañar la planta, inclusive provocar la muerte.


4.   Una vez plantada la planta, podemos decorar la maceta utilizando piedras decorativas. En nuestro caso, hemos realizado dos decoraciones diferentes: utilizando piedras blancas y utilizando bolas de arcilla. Protegen frente a los cambios bruscos de temperatura, así como de la formación de costras superficiales que apelmazan la superficie. También poseen un gran interés decorativo por su apreciado aspecto estético. Las dos combinaciones son muy originales, ajustándose al gusto de cada cliente.


miércoles, 22 de marzo de 2017

CÓMO PODAR EN 6 PASOS


Nunca podes sin un buen plan, sigue estos pasos para evitar podas innecesarias:

1 .En primer lugar, elimina todos los tallos rotos, las ramas muertas y las que parezcan enfermas.
2. Pasa a las ramas laterales y deja por lo menos dos o tres yemas en cada rama para permitir el
    nuevo crecimiento.
3. Mantén en mente el hábito de crecimiento natural de la planta cuando la podes. Retira aquellos
    más débiles y estrechos, deja los realmente fuertes para que tiren y crezcan sin problemas.
4. Regularmente, vuelve y revisa los progresos.
5. Los tallos que no son fértiles que crecen cerca del nivel del suelo o en el tallo inferior de una
    rama siempre deben eliminarse.
6. Si tienes que podar drásticamente un año, debes permitir que la planta crezca después uno o dos
    años para recuperarse antes de podarla de nuevo.

miércoles, 15 de marzo de 2017

CONTROL DE PLAGAS EN HUERTO Y JARDÍN

Hay algunas plagas muy comunes que afectan a la mayoría de plantas que cultivamos a las que podemos dar solución de forma natural y disfrutar de nuestra huerta y jardín en su máximo apogeo.

Para prevenir plagas es importante que tengamos en cuenta algo tan sencillo como la asociación de cultivos. Esto nos ayudará a prevenir muchas de las plagas, aunque no todas, especialmente si no tenemos mucha experiencia en la horticultura o en la jardinería.

Cuanta mayor variedad de insectos, pájaros, reptiles, etc. haya en nuestro huerto o jardín mayores posibilidades habrá de que estas comunidades se autorregulen, que se consiga equilibrar el ecosistema y no tendremos problemas por la aparición de plagas. Ten en cuenta que la mayoría de insectos y otros seres vivos que encontraremos son muy importantes y beneficiosos en la agricultura ecológica u orgánica. Por eso es muy importante aprovechar la fauna auxiliar y crear espacios a los que puedan acudir, como es el caso de estanques y promover la biodiversidad.

Otro punto importante para prevenir la progresión de plagas es revisar las plantas regularmente. En ocasiones, identificar las plagas en las primeras etapas de desarrollo nos será útil para prevenir que se produzcan daños graves en las plantas. Mira bien el envés o parte posterior de las hojas y posibles decoloraciones en éstas o zonas con brillos.

miércoles, 8 de marzo de 2017

¿QUE ES EL CERTIFICADO DE REFORESTACIÓN?


Actualmente el principal estímulo para la reforestación en Colombia es el Certificado de Incentivo Forestal (CIF) creado en 1994. Este un aporte en dinero que hace el Gobierno para cubrir parte de los gastos de establecimiento y mantenimiento en que incurran quienes establezcan nuevas plantaciones forestales con fines protectores-productores en suelos de aptitud forestal.

El CIF fijó como meta la reforestación de 160 mil hectáreas en un período de 4 años (1994-1997). Después de 8 años se estima que este incentivo ha propiciado el establecimiento de solo 60 mil hectáreas, esto es poco más de la mitad de la meta trazada. Dicha superficie equivale a una tasa de plantación de 7500 hectáreas por año. Es decir, en el mejor de los casos sólo ha permitido compensar las tasas anuales de aprovechamiento.
El CIF se creó para compensar al reforestador por las externalidades ambientales que dimanan a partir del establecimiento de las plantaciones. Se trata de compensar al reforestador por los beneficios sociales que genera y que el mercado no le reconoce. Es decir, el CIF está perfilado para estimular el establecimiento de plantaciones con fines protectores.

miércoles, 1 de marzo de 2017

¿QUE ES EL COMPOSTAJE?


El compostaje es una técnica o proceso mediante el cual se crea a partir de unos residuos orgánicos un abono de alta calidad.
Este proceso no es más que la imitación de lo que ocurre en la Naturaleza sin ayuda del ser humano: la materia orgánica de plantas y animales se mezcla en el suelo, se descompone y aporta sus nutrientes a la tierra de donde se alimentan de nuevo las plantas: de este modo se cierra el ciclo.

 Proceso

El compostaje se forma gracias a desechos o residuos organicos, tales como restos de comida, restos de café, trozos de madera, poda de jardín,…
Todos estos residuos se almacenan en un depósito o se acumulan, donde entran en acción bacterias aerobicas termófilas que descomponen el material en presencia de oxígeno.


El resultado es un abono orgánico de alta calidad.

miércoles, 15 de febrero de 2017


CLAVES PARA CUIDAR LAS PLANTAS CUANDO HACE MUCHO CALOR


 El verano es una época dura para las plantas en regiones calurosas. Si bien es en esta estación cuando la mayoría de las especies experimentan su ciclo de floración, las altas temperaturas, la acción de los rayos del sol y los bajos niveles de humedad pueden hacer que lo pasen mal, se sequen e incluso que mueran. Seguir una serie de consejos y recomendaciones permite cuidarlas mejor y evitarles sufrimiento.

Uno de los factores fundamentales para que las plantas tengan un buen verano es el riego. Debe ser abundante, en particular en las regiones más secas, pero hay que tener en cuenta algunas cuestiones:

El calor provoca que el agua se evapore muy rápido, es importante proporcionar riegos profundos, para que el agua alcance las raíces de los ejemplares. Por ello, más allá de la técnica que se emplee, lo idóneo es echar el agua con lentitud, para suministrar una buena cantidad sin que el sustrato se encharque.

Hay que respetar los horarios para el riego: por la mañana temprano, por la tarde cuando ya se ha puesto el sol o durante la noche. Esto se recomienda a lo largo de todo el año, pero en el verano es casi imprescindible. Regar en las horas de calor representa un derroche de agua, debido a la evaporación (lo cual genera costes inútiles para el medio ambiente y la factura del agua); pero además, puede dañar a las plantas, por el "efecto lupa" que las gotas ejercen sobre los rayos del sol.

Cerca de las plantas viene bien colocar uno o varios recipientes con riego, para que al evaporarse transmitan humedad a los ejemplares. También, aunque se debe tener cuidado porque no todas las especies lo toleran, se puede pulverizar agua sobre las plantas, para refrescar sus hojas
Las plantas en macetas necesitan más riego que las situadas en el suelo. Las raíces de estas últimas pueden buscar humedad y nutrientes en el sustrato del jardín, pero las que se hallan en tiestos dependen de la limitada porción de tierra en la que se encuentran y del agua que se les eche. Además, las plantas en macetas de cerámica o de otros materiales porosos, así como de boca grande, precisan más agua que las ubicadas en tiestos de plástico o de boca más pequeña.

Lo más recomendable es la creación de microclimas: en el jardín, a partir de tener en cuenta las condiciones del lugar, la presencia de árboles o grandes arbustos, estanques, etc. ; y en una terraza o balcón, a través de la colocación de varias plantas en una misma maceta o muchos tiestos en la misma zona.


Otras recomendaciones para proteger las plantas del calor.


Además del riego, un factor fundamental para proteger a las plantas de los rigores del verano es evitar la exposición directa a los rayos solares. Estos pueden quemar y deteriorar de forma grave las hojas, flores y otras partes de las plantas, incluso de muchas que los toleran en otras épocas del año. Por eso, conviene colocarlas en sitios luminosos pero que no reciban el sol directamente o, en todo caso, cubrir los ejemplares con una tela de sombra, que sirva como filtro.


Un truco para impedir que las macetas absorban mucho calor a través de sus caras externas es recubrirlas con tela de brezo. Si la planta debe quedar expuesta al sol durante algunos momentos del día, se puede colocar el tiesto en el interior de otro más grande, para que este sea el que reciba el calor más intenso y el de dentro quede protegido por su sombra. También conviene, si es posible, alejar las macetas de las paredes, ya que estas irradian calor cuando están expuestas a altas temperaturas.

miércoles, 8 de febrero de 2017

TIPOS DE RIEGO


El riego es fundamental si estamos pensando en cultivar cualquier producto agrícola o planta. Mediante el riego damos agua al suelo para que las plantas puedan crecer. Existen diferentes tipos de riego.

A nivel mundial, el riego consume un alto porcentaje de recursos hídricos. Por ello, actualmente se intenta probar los diferentes tipos de riego existentes con la intención de ahorrar agua sin que ello afecte a la siembra.

A continuación pasamos a ver cuáles son los tipos de riego más importantes y más usados, y a descubrir sus principales ventajas e inconvenientes.

Riego por surcos
Es un tipo de riego en el que el agua circula por canales y estructuras previamente diseñadas para efectuar el riego de determinadas zonas. En este tipo de riego, las hojas de las plantas o vegetales no entran en contacto directo con el agua.

Ventajas:
·         Es un sistema bastante sencillo que no necesita de instalaciones y que evita enfermedades de las plantas al no entrar estas en contacto directo con el agua.
·         Por otro lado, este sistema tiene un coste de instalación menor que otros tipos de riego, ya que no se necesitan tantos componentes de precio elevado como otros sistemas de riego por aspersión, por ejemplo tuberías o aspersores.
·         También cabe destacar que es un tipo de riego que solo actúa sobre las raíces de las plantas, sin mojar el resto de sus partes. Es un sistema ideal para huertos pequeños y terrenos uniformes.

Desventajas:
·         No es un tipo de riego indicado para zonas con colinas o pendientes marcadas, ya que los desniveles dificultan el avance del agua por los surcos.
·         Es un tipo de riego que necesita de una gran cantidad de agua.
·         Elevadas pérdidas de agua por evaporación. Este tipo de riego pone más difícil la misión de regular el caudal necesario de agua que llega a las plantas.
·         Por otro lado, el trabajo del operario es más complicado, ya que ha de realizarse “in situ”, esto es, el trabajador se debe meter “en el barro”.



Riego por goteo
Este tipo de riego arroja el agua con muy baja presión hasta las raíces y hasta distribuir el goteo. Se hace con ayuda de tubos pequeños, dispuestos en el suelo o enterrados. Se riega con mucha precisión pero, fundamentalmente, se hace porque este tipo de riego ayuda a ahorrar mucha cantidad de agua. Además, se limitan las pérdidas por evaporación, dispersión o infiltración. En la actualidad, el gota a gota se utiliza mucho para regar frutas, verduras, cereales, flores o viveros pequeños. Por supuesto, podríamos utilizarlo en nuestros invernaderos pequeños o también en invernaderos caseros.


Ventajas:
·         Permite automatizar las instalaciones y puede ser implantado en cualquier tipo de terrenos, incluso en terrenos más rocosos.
·         Necesita una menor cantidad de agua que el resto de tipos de riego, gracias a las salidas de agua bien estudiadas, según las necesidades del cultivo.
·         Es un tipo de riego mucho más indicado para zonas arenosas o con pendientes.
·         Al regar solo en las zonas donde realmente se necesita, combate a proliferación de malas hierbas.

Desventajas:
·         Los canales de riego se pueden atascar y producir obstrucciones en el sistema de riego, que pueden dar lugar a desigualdades en el regadío.
·         También es probable que los orificios de salida queden taponados y afecte al riego.
·         Por otra parte, es necesario hacer una inversión inicial elevada, ya que se necesitan emisores, tuberías, un sistema de control que esté automatizado, etc.
·         Otro de los inconvenientes es que se puede producir una acumulación elevada de sales en las zonas de goteo, sobre todo si no se producen lluvias suficientes como para limpiar el terreno de estas sales.


Riego por aspersión
Son canalizaciones subterráneas que distribuyen el agua a través de las tuberías. Una especie de lluvia fina, riegan las plantaciones proyectando el agua bajo presión.

Ventajas:
·         Permite ajustar lo potencia y la orientación del riego, asegurando que llega por igual a todo el terreno.
·         Es susceptible de ser usado tanto en terrenos llanos como en zonas con elevaciones o depresiones del terreno.
·         Por otro lado, el consumo de agua necesario es menor que en otros tipos de riego, por ejemplo en el caso del riego por surcos. La potencia de las mangueras de aspersión permite que el agua llegue a más distancia y que sean necesarias menos salidas de riego para llegar a todo el terreno.
·         Por último, la presión del agua no es grande por lo que a pesar de entrar en contacto directo con plantas o vegetales, no causa ningún tipo de daño en ellas. Además, la cantidad de agua y la presión del agua de las mangueras se puede ajustar fácilmente según las necesidades del terreno.
·         A pesar de que el agua sale con más presión, esta se deposita suave y uniformemente sobre el terreno, es decir, no llega a las plantas con presión suficiente como para causar daños en ellas.

Desventajas:
·         Se necesita estudiar bien la colocación de los aspersores, ya que una mala situación puede provocar gasto excesivo de agua, y un exceso o defecto de riego en determinadas zonas. Por ejemplo, cuando dos aspersores lanzan agua en una misma dirección, o cuando algún aspersor malgasta agua “regando” las paredes” o la potencia del agua llega hasta fuera del terreno.
·         Por otro lado, necesita menos agua que el riego por surcos pero más que para el riego por goteo.
·         No riega únicamente las raíces, sino que moja por completo el resto de la planta, hecho que puede provocar enfermedades en la planta.


Todos diferentes tipos de riego que ayudan a ahorrar agua y a preservar a nuestro medio ambiente al mismo tiempo que están haciendo posible la vida de las plantas.