miércoles, 25 de enero de 2017


TIPS DE JARDINERÍA





Ten en cuenta estos concejos de cudados básicos pero muy importantes tanto para tu jardín como para las macetas de tu hogar o terraza, para que tengas unas plantas siempre “muy vivas” y con un color excelente. Ten en cuenta que una planta sana es una planta que tendrá menos riesgo de coger plagas




1.  Primero de todo piensa el tiempo que vas a dedicarle. Cada planta necesita un cuidado distinto. Si vas a dedicarle poco tiempo o sólo los fines de semana empieza con plantas sencillas y que necesiten pocos cuidados. Normalmente las plantas autóctonas son las que menos cuidados necesitan ya que están aclimatadas perfectamente a nuestro clima. La planta crasa es un ejemplo de planta que necesita pocos cuidados.

2.  Lleva una agenda de tus plantas: Busca información sobre la planta que tienes y apúntate cuál es su periodo de floración, de abono y, en caso de necesitarlo, de poda.

3.  Tener las macetas y plantas limpias y libres de hojas y flores muertas.  Si aparecen malas hierbas quitárselas lo antes posible para que todos los nutrientes de la tierra sólo los absorba nuestra planta.

4. Si tus plantas son floreadas. Puedes aplicar esto para conseguir plantas con mácuidados-plantass flores: Compra plantas con pocas flores pero que tengan capullos cerrados.  Luego colócalas en un lugar que tenga mucha luz, la tierra que tenga una humedad ligera y un abono rico en potasio y fósforo.

5. Si lo que tienes es un jardín con césped aprovecha para plantar justo en los bordes del césped las plantas que necesiten un mayor riego, ya que es ahí donde se acumula más agua.

6. Cuando riegues las plantas hazlo siempre sobre la tierra y nunca sobre las hojas o flores ya que pueden pudrirse y son más propensas a las plagas. Si es posible utiliza el agua de riego tibia.

7. Es muy importante que la tierra esté aireada. Cada cierto tiempo airea la tierra ayudándote con un rastrillo.

miércoles, 18 de enero de 2017


SEMILLEROS PARA CULTIVO DE HORTALIZAS


Asociación de cultivos

Consiste en cultivar al mismo tiempo y en la misma parcela dos o más hortalizas siempre y cuando tengamos en cuenta lo siguiente:

1. Que tengan las mismas exigencias en temperatura, riego, etc.

2. Que sus raíces no entren en competencia entre sí, es decir, una sea de raíces profundas y otra de superficiales para así aprovechar mejor el abonado.

3. Que tengan diferentes necesidades referente a elementos nutritivos.

Por lo general se suelen asociar plantas de ciclo diferente pero que coincide la fase inicial de una con la final de otra, para que el sitio que deja una lo pueda ocupar la otra, efectuándose la plantación de una antes de recolectar la otra, consiguiendo así una mayor precocidad. Como ejemplo podíamos poner cebollas y lechugas.

Semilleros

Para semillero, debemos destinar la parcela más cálida del huerto, a ser posible con una orientación al sol de mediodía y adosada al muro de la vivienda ya que de este modo resulta más fácil la construcción de cajoneras o túneles de plásticos para la protección de las jóvenes plantitas.

Preparación del terreno

La preparación debe ser esmerada ya que de ésta va a depender la germinación de las semillas. Se puede preparar para la siembra el fondo de la cajonera o bien unas bandejas o terrinas que una vez sembrados se colocan en el interior de la misma.

Tanto en uno como en otro caso, debemos colocar una primera capa de grava fina o arena de unos 2-3 cm. para que nos sirva de drenaje; a continuación se coloca una segunda capa de 7-8 cm. de mantillo o estiércol muy hecho que previamente se ha pasado por un tamiz de malla grande para eliminar los elementos gruesos y por último una capa de 1-2 cm. de turba fina.

A continuación se riega con regadera o manguera a la que se le ha adaptado una ducha de gota muy fina para impedir que se produzcan desplazamientos del substrato así preparado.

La siembra

La siembra puede hacerse a voleo, en línea o bien en macetitas de turba, yogurteras o macetas de plástico que previamente se han llenado con una mezcla de turba y mantillo y arena en la proporción 2: 1: 1 colocando 2 o 3 semillas por maceta.

Si la siembra se hace a voleo, la semilla se desliza entre los dedos índice y pulgar al mismo tiempo que se le da un movimiento de zig-zag a la mano. Las semillas se deben enterrar con una capa de turba fina igual al doble de su diámetro, de ahí que en muchas de ellas la siembra sea superficial sin necesidad de cubrir.

Riego del semillero

Una vez sembradas, se debe dar un riego con una regadera o ducha de agujero fino dando un ligero movimiento a la mano para que no se produzcan desplazamientos de las semillas. Los riegos deben ser frecuentes y con poca cantidad de agua impidiendo que por cualquier causa se seque el substrato ya que se interrumpiría el proceso de germinación, siendo inútil el trabajo realizado.

En caso de que empiecen a pudrir las jóvenes plantas por el cuello, se distanciarían los riegos al mismo tiempo que se le hace uno o dos tratamientos con Euparen al 0,15%, Benlate al 0,1% o Bavistin al 0,1%.

Aireación

Los semilleros debemos ventilarlos con objeto de que se renueve el aire del mismo a diario, para lo cual levantaremos la protección de cristal o plástico de las cajoneras durante un par horas.

Aclareo

Una vez las semillas han germinado y tienen dos o tres hojitas bien formadas se procede al aclareo de las mismas para lo cual elimianamos las más débiles.

Si la siembra se hizo en macetitas de turba, sólo se deja planta por maceta.

Si se hizo a voleo o en líneas, una práctica muy usada es la de repicar las plantitas colocándolas en macetas de plástico, yogurteras o macetas de turba, utilizando una mezcla similar a la utilizada en el semillero. Las plantas así repicadas se pueden colocar de nuevo en las cajoneras hasta que llegue el momento de su plantación en el tereno definitivo.

En la actualidad y con la aparición de los Garden Centers hay en el mercado unas bandejas o multipots con plantas ya preparadas con las variedades más apropiadas a cada época, de 8-10 cm. De altura dispuesta para plantarse immediatamente, sin necesidad de recurrir a las siembra y cuidado de las jóovenes plantas sobre todo para aquéllos aficionados que poseen a varios kilómetros de la cuidad y que en invierno resulta engorroso desplazarse a preparar y cuidar los semilleros.

Trasplante

Esta operación consiste en arrancar las plantitas del semillero o bien coger las macetitas de turba, yogurteras, etc., y colocarlas en el terreno definitivo donde completarán su ciclo biológico. Se debe hacer cuando las jóvenes plantas tienen bien desarrollado su sistema radicular y no haya peligro de bajas temperaturas. El momento ideal de efectuar el trasplante es cuando las plantas tienen 4-5 hojas.

Debemos procurar no deshacer el cepellón de tierra que llevan las raíces adherido; para ello se debe dar un riego copioso antes de efectuar el trasplante sobre todo en aquellos semilleros que hay que arrancarlos. Antes de efectuar el trasplante debe estar preparado el terreno que va a recibir las plantas con los surcos de riego y en tempero. Una vez trasplantadas se les dará un riego abundante, procurando mantener la humedad constante varios días después, hasta que las plantas empiecen a emitir nuevas raíces.

El trasplante debe hacerse a últimas horas de la tarde o bien durante días nublados con objeto de que las plantas sufran lo menos posible. Si se dispone de una malla de plástico negro o cañizo, es conveniente cubrirlos los primeros días con objeto de que los rayos solares no lleguen directamente a las hojas y puedan producir quemaduras o deshidratación.

miércoles, 11 de enero de 2017

ROTACIÓN EN CULTIVOS DE HORTALIZAS


Una vez hecha la división del huerto en eras, debemos procurar no sembrar dos años seguidos una hortaliza en la misma era ya que nos traería problemas de cansancio del terreno a.si como problemas fitopatológicos y esterilidad del mismo. Lo ideal es hacer una rotación en las diferentes parcelas de cultivo. Debemos alternar una hortaliza poco exigente en elementos nutritivos con otras más exigentes.

Por lo general las plantas pertenecientes a la misma familia tienen todas más o menos igual su sistema radicular y sus necesidades nutritivas son similares. Las hortalizas más exigentes son las de bulbo, tubérculo y raíz, seguido de las de hoja, flor, fruto y semilla.

Las hortalizas de hoja son muy exigentes en nitrógeno, de ahí que se alternen con las leguminosas de semilla que no necesitan apenas aportaciones de nitrógeno porque lo fijan con sus raíces de la atmósfera.

Algunos cultivos muy esquilmantes como el cardo, cebolla, puerros y espinacas, no se deben volver a sembrar en la misma tierra hasta que no hayan pasado un par de años.

El poder hacer una rotación de cultivos atendiendo a todas las exigencias de las plantas resulta a veces difícil sobre todo para el aficionado, ya que entran en juego una serie de factores que se escapan a su alcance. Atendiendo sólo y exclusivamente a las necesidades de abonado, podemos hacer la siguiente alternativa para cuatro años. Dividimos el terreno en cuatro parcelas, y dentro de cada parcela se harán las eras que creamos convenientes según los cultivos que deseemos poner.

1. parcela.: Se plantarán tomates, coles, coliflores, etc
2. parcela. : Se plantarán ajos, cebollas, puerros, remolacha, escarola, lechugas, zanahorias, etc.
3. parcela. : Habas, judías, guisantes.
4. parcela. : Patatas, cardos, etc.

Al finalizar el primer año todos los cultivos cambian de parcela, así pues los de la 2. a pasan a la primera, los de la primera a pasan a la segunda y los de la cuarta a la tercera. En cuanto al abonado y estercolado, diremos que a la parcela número «1» se le da un fuerte estercolado. A la parcela número «2» se le aplicará estiércol muy hecho o turba; la parcela tres se abonará con abonos minerales solamente y la parcela cuatro con estiércol y abonos minerales. Otro sistema de alternativa sería siguiendo la clasificación que hemos hecho según su aprovechamiento.

1. Hortalizas cultivadas por sus hojas y frutos (lechuga, tomate, berenjenas, melones, etc.)
2. Verduras de raíz (zanahorias, rábanos…)
3. Leguminosas (habas, judías, guisantes).
4. Tubérculos (patatas…)

miércoles, 28 de diciembre de 2016

SIEMBRA Y MANTENIMIENTO DE PRADO




El prado es uno de los elementos más relevantes a la hora de ornamentar un jardín. Las distintas funcionalidades y provecho que le podemos sacar, hacen que el césped sea bastante importante, debido a que nos ayuda a generar armonía, integración vegetal, textura y una variedad de sensaciones.





Preparación de la tierra

Una vez seleccionado el sector donde se establecerá nuestro prado, se debe picar el suelo a una profundidad de 20 a 30 cm., removiendo y eliminando piedras, trozos de madera y terrones. Además se deben eliminar las malezas o plantas indeseadas en forma manual o por medio de la aplicación de herbicidas


Siembra de prado

Apisonar el terreno, pasando idealmente un rodillo o pisón suavemente, para obtener una cama de semilla firme y pareja.Distribuir la semilla seleccionada,  según las características de suelo, luz, riego y condiciones de uso que se la va a dar, en forma uniforme y en la dosis recomendada, cubriéndola posteriormente con una delgada capa de tierra de hojas previamente harneada.


Riego

Regar inmediatamente en forma de lluvia fina, no permitiendo que el suelo se seque en el primer mes para asegurar su establecimiento.El riego posterior debe ser realizado en forma regular sobre todo en períodos de altas temperaturas, llevándose a cabo en horas frescas (mañana temprano o al atardecer).Cuando ya está establecido el césped y no dispone del agua que necesita para su desarrollo, se pondrá de color amarillo, se secará y terminará muriendo. El remedio es muy sencillo: regarlo abundantemente, y con mayor frecuencia si es verano y hace calor.



Mantenimiento

Una labor fundamental es mantener oxigenada las raíces, y la forma más rápida y sencilla de hacerlo es “horqueteando” por todo el jardín para que el aire, agua y nutrientes lleguen a las raíces y así el prado se mantenga en buenas condiciones de color y desarrollo normal.


Fertilización

Cuando ya el pasto esté establecido, se recomienda aplicar fertilizante en base de nitrógeno o uno completo que contenga mayor porcentaje de este elemento, que es el apropiado para mejorar el color verde y crecimiento del césped.En cuanto a fertilizantes, existe uno ideal para cada estación del año. Una muy buena alternativa son los llamado de “lenta entrega”, ya que permiten que los elementos o nutrientes se vayan incorporando lentamentea las raíces, y lo que puede tardar hasta 3 meses.


Corte del Prado

En  términos generales la altura normal en que se debe mantener el césped es a unos 3 ó 5 centímetros.  Sin embargo, los céspedes muy finos, se cortan más bajo, es decir 1 a 2 cms. El primer corte  se debe efectuar cuando el césped alcance una altura entre 8 a 10 cm. Preocúpese de usar máquinas con filos buenos.Tanto en invierno (por el frío), como en verano (por el calor), será  preferible mantener el césped un poco más alto de lo normal,  ya que así desarrollará raíces más potentes y estará más fuerte para aguantar estos 2 períodos más complicados del año.




miércoles, 21 de diciembre de 2016

¿QUE ES LA PODA EN ATURAS?


Por qué es necesaria la poda en altura

Llega un momento en que es totalmente necesario hacer una tala de árboles porque esto hará que continúe teniendo una forma equilibrada, mejor crecimiento, producción y buen desarrollo. Y es obligado hacerlo cuándo ciertas ramas o partes de nuestro longevo árbol han crecido de tal forma que “están descontroladas”.
Muchas veces es requerido cuándo estamos ante un caso de seguridad como suele suceder en los parques urbanos. Estos son árboles con muchos años que a veces tienen ramas en claro peligro de desprendimiento. Aquí sin lugar a dudas estamos ante una clara situación en la que tenemos que coger una moto sierra y empezar el trabajo de poda en altura.


¿Cuándo efectuar una poda en altura?

Este es un punto importante porque debemos diferenciar el objetivo que estamos buscando al podar un árbol. Hay momentos como hemos dicho antes que la situación es de peligro y la poda debería ser lo más rápido posible porque buscamos solventar esa situación. Pero otras veces nuestro árbol goza de salud sólo que ha crecido demasiado o queremos hacer algo de limpieza en él, aquí es mejor esperar y podar en la mejor época del año según la especie con la que estemos tratando.


Tipos de podas

Las distintas formas que existen para podar un árbol no están del todo definidas en algún manual o por alguien importante dentro del sector. Pero si es cierto que hay unos tipos de podas que pueden decirse internacionales y que están muy ligados al momento de vida del árbol o a su situación concreta en cuanto al ramaje y crecimiento.
Una de las formas que hay de poda en altura y que está encaminada a darle una forma concreta a nuestro árbol, es la conocida como poda de formación.
Según van pasando los años y nuestro árbol o árboles van tomando tamaño y creciendo en altura, debemos efectuar un desbroce anualmente de tal forma que con esta poda mantenemos el buen estado y salud del árbol.  Utilizamos la poda de mantenimiento para orientar las ramas y el crecimiento según nuestro interés, quitar ramas viejas o que producen algún peligro para la zona y los peatones.

miércoles, 14 de diciembre de 2016

¿QUE ES EL CONTROL FITOSANITARIO?





El control fitosanitario son los métodos y técnicas para la prevención, control  o curación de las enfermedades de las plantas, procurando la estabilidad y bienestar de tu cultivo o agro ecosistema.


Consiste en la utilización de las practicas a agrícolas ordinarias, o algunas modificaciones de ellas, cuyo objetivo es prevenir ataques de plagas o enfermedades, haciendo el ambiente menos favorable para su desarrollo o disminuir sus daños. Algunos de los pasos para realizar el control son:


Limpieza y desinfección de sustratos, materiales e infraestructura para hidroponía:

Esto es de suma importancia ya que con esto evitaremos que surjas enfermedades que puedan dañar nuestro cultivo en sus diferentes etapas de desarrollo.
Recuerda que no vasta limpiar y desinfectar solo una vez, es importante contar con un calendario de limpieza y ordenamiento de tu zona de trabajo anual y semanal, así como unas guías en las cuales detalles paso a paso el proceso de desinfección de tu material de trabajo, para facilitar su aprendizaje y su hábito.
Recuerda también que en un ambiente limpio y ordenado se trabaja mejor y tus plantas te lo agradecerán.


Condiciones ambientales:

Si tu cultivo es a cielo abierto, hay que tomar en cuenta que en la época seca (calor) se tiene una mayor incidencia de plagas.
En cambio en la época de lluvia, los problemas son originados por enfermedades en su mayoria.
En muchos casos, cuando las plantas están muy juntas unas de otras, se crean micro ambientes entre una planta y otra y estos se saturan de humedad debido a la transpiración de las plantas.
Esto puede ocasionar también la formación de hongos; por eso debemos respetar el espacio físico que requiere cada planta así como también, dependiendo del tipo de instalación que tengamos y el tamaño del proyecto, podemos instalar un sistema de ventilación interno.


C. Rotación de cultivos:
Si se tiene a cielo abierto o el cultivo se maneja en suelo dentro del invernadero tenemos que alternar la siembra en los cultivos para no agotar las sustancias nutritivas presentes en el suelo. De lo contrario, podríamos provocar una deficiencia de nutrientes en las plantas y hacerlas susceptibles a las plagas y enfermedades.


Uso de policultivos:

Se utiliza tanto en cielo abierto como invernadero, y es el proceso de realizar un cultivo pero con diferentes especies que no se afectan o que se benefician entre sí. En un policultivo se busca la asociación entre una planta y otra, esto no solo reducirá la incidencia de plagas y enfermedades ya que la plaga de un cultivo de una determinada familia botánica, no afectara a otro cultivo de la otra familia y viceversa. Sino que también proporcionara grandes beneficio ya que algunos cultivos al interaccionar con otros mejoran su resistencia y obtienen un mejor sabor.



Uso de variedades tolerantes o resistentes a plagas y enfermedades:

Esto ayudara a disminuir el impacto económico que se podría formar por el daño causado por plagas y enfermedades. Sin embargo al ser variedades comerciales se requiere comprarlas cada año o cada que se vaya a cultivar.

Uso de plantas benéficas:

Es la utilización dentro o fuera de nuestro cultivo de plantas que repeles algunas plagas o que traen algún beneficio como atraer insectos benéficos a nuestro cultivo.



 Eliminación de fuentes de infección:

 Debemos eliminar de los restos de tallos y hojas muertas, con esto evitaremos la multiplicación de insectos y enfermedades que puedan perjudicar nuestras plantas. Además estimulamos el buen crecimiento y desarrollo de nuestro cultivo.



Nutrición:

En general se considera que las plantas más vigorosas; es decir aquéllas que crecen en suelos naturalmente fértiles o que se encuentran bien fertilizados, son capaces de tolerar mejor los ataques de las plagas. Es por eso que es muy importante mantener tus plantas bien nutridas, para lograr esto es importante cambiar al menos una vez al mes tu solución nutritiva y mantener estable el pH de ésta, buscando que la planta absorba bien los nutrientes que le suministramos.


miércoles, 7 de diciembre de 2016

PODA TÉCNICA DE PLANTAS





La poda consiste en la supresión de algunas partes de las plantas leñosas, ya sean ramas o raíces. Es una técnica delicada que puede perjudicar permanentemente la planta si se realiza de forma incorrecta. La técnica y el momento adecuado varían de acuerdo a la edad y circunstancias de la planta. Por lo tanto es conveniente pedir consejo a expertos o consultar la documentación apropiada.


¿POR QUÉ PODAR?


Saneamiento: Eliminar las ramas muertas, enfermas o débiles, para prevenir plagas o enfermedades.
Seguridad: Previene el desplome de ramas dañadas o inestables.
Formación: El objetivo es configurar el aspecto de la planta, dar una estructura adecuada.
Fructificación: Mejoras la calidad de flores o frutos.

INCONVENIENTES DE LAS PODAS RADICALES


Debilidad del ejemplar, ya que su energía queda reducida debido a la producción de nuevos brotes, por lo tanto estar mas expuesto a plagas o enfermedades.

Los vástagos nuevos crecen mucho y muy deprisa, pero son bastante inestables. Sus uniones con la madera vieja puede verse afectada por la aparición de huecos y putrefacciones.

Problamente tendremos que aplicar cuidados adicionales para subsanar los daños y problemas que puedan surgir, tales como fracturas, enfermedades, etc.